Nuestro cerebro es el encargado de coordinar todas las funciones del cuerpo. Para llevar a cabo esta tarea es necesario el correcto funcionamiento de las neuronas, que se comunican entre sí a través de corrientes eléctricas. Cuando este proceso se ve interrumpido de algún modo por factores externos o internos, aparecen diversas patologías que se pueden abordar mediante el Neurofeedback.
Nuestro cerebro tiene billones de neuronas y cada vez que se transmite información entre ellas se crean pequeñas corrientes eléctricas que pueden ser visualizadas en tiempo real a través de un electroencefalograma o EEG. Con esta ayuda visual del funcionamiento del cerebro, se pueden llevar a cabo las acciones de neurofeedback.
Con la ayuda de un software de neurofeedback, se conectan algunos electrodos al cuero cabelludo del paciente y se le brinda al cerebro información visual y auditiva proveniente de la misma actividad cerebral. Cuando hay alguna irregularidad el software la detecta y detiene los estímulos visuales y auditivos, de este modo, el cerebro puede identificar y corregir de manera espontánea, los errores.
El neurofeedback se debe aplicar por personal calificado que conozca el funcionamiento del cerebro y del programa como tal, ya que esta terapia funciona de manera gradual.
El neurofeedback ha demostrado ser eficaz para tratar las dificultades psicológicas más recurrentes como son la ansiedad y la depresión. Para estos casos incluso ha sido exitoso en pacientes con resistencia al tratamiento. La mayor ventaja del neurofeedback es que no depende exclusivamente de un tratamiento farmacológico.
El neurofeedback está enfocado en una optimización de la función cerebral, entonces no es necesariamente una cura para enfermedades mentales, es un ejercicio del cerebro, una retroalimentación basada en su propia actividad, que permite optimizar y mejorar diversas funciones. El neurofeedback puede ser utilizado en personas con altos cargos directivos que necesitan enfocarse, deportistas de alto rendimiento, artistas o personas que quieran mejorar su funcionamiento neuronal y aplicarlo a la concentración, la atención, la creatividad, etc.
1. Es indoloro.
2. No produce electricidad.
3. Es una terapia que cuenta con respaldo científico.
4. Entrena el cerebro gradualmente y ese entrenamiento queda para siempre.
5. Ayuda a tratar la ansiedad, depresión, el trastorno por déficit de atención (TDAH), estrés, entre otros síntomas.
6. Es un entrenamiento para potenciar el funcionamiento cerebral, por lo tanto, no es necesario padecer una enfermedad mental para utilizarlo.
7. Mejora de la memoria
8. Potencia la capacidad de concentración.
9. Mejora la creatividad
10. No requiere medicamentos.